MI CORTO RE-LOCO EXPERIMENTAL

Este es "El Paseo de Maltecci" un corto surcado por referencias a la novela negra.
Lo más llamativo es la manera en que está resuelta la imagen, totalmente en "cámara subjetiva" o sea que vemos exactamente lo mismo que un personaje, en este caso el protagonista.
Como una analogía total entre el lente y el ojo es imposible, busqué incluir planos abiertos y cerrados según el persoaje concentrara su atención, esto permite un relato visual más movido que la clásica subjetiva en permanente lente gran angular. Para simular que la visión es contínua, todos los cortes tienen un barrido de cámara de unos cuadros al principio, como si el ojo fuera de un lugar a otro muy rápido. Muchos de estos barridos fueron hechos en el momento de la filmación, por lo que yo mismo tuve que hacer cámara, porque de alguna manera ya estaba haciendo el montaje, determinando cuánto duraba cada toma en rodaje, algo muy riesgoso y poco recomendable, pero que quedó muy bien.
Hay un cameo del director cinematográfico Fabián Hofman, que recibe una buena piña.
Con este corto me saqué las ganas de experimentar con la cámara subjetiva. La voz en off a lo Frank Miller (narrador protagonista en presente) permite cubrir el hueco de información que nos provoca la exclusividad de la subjetiva, esta información es "qué siente el que mira".

GRILLO CUENTA TODO

Acá está el "backstage" de Fantasma de Buenos Aires. En realidad casi todo el video es una entrevista a mí, donde hablo un poco de mi infancia y de cómo hay una línea que une mis primeros cortos con mi largo.
La segunda mitad es más backstage propiamente dicho o "making of".
¿No hace falta una buena palabra en castellano para esto? "Detrás de escena" da muy teatral.
En fin, la gran sorpresa es que aquí se devela el increíble truco hipertecnológico que utilizamos para mover las copas en la alacena.

DIRECTOR ADOLESCENTE

A los diecisiete años filmé este corto. En esa época estaba muy preocupado porque se avecinara una guerra nuclear entre la URSS y USA de modo que quise "hacer algo" al respecto.
En el equipo técnico éramos sólo dos personas, Pablo M. Lara (que hacía producción y les ponía sudor a los actores con un bombero loco) y yo que dirigía y hacía cámara. Nunca hubo un guión, simplemente tenía todo en la cabeza. Lo filmamos en un día. La bandera de EEUU de la gorra está hecha con una banderita de un pantalón UFO. La ropa nos la prestó un local que vendía rezagos militares llamada "Chinche" que tuvo su canje en los créditos finales, cosa que debe haber generado un tsunami de compradores frente a sus puertas.
En 1988 ganó un premio en un concurso en USA, que ahora no existe más. El concurso, no USA...